sábado, 30 de noviembre de 2024

El retorno de Benedetti: elecciones, autocracia y corrupción

 Publicado en El Espectador, Diciembre 5 de 2024 


Al igual que el repugnante nombramiento de Hernán Giraldo como gestor de paz, la vuelta de Armando Benedetti a la primera línea política parece relacionada con la manipulación de votos. 


En ambos casos se estaría buscando garantizar en 2026 la continuidad del  Gobierno del Cambio.  Con soberbia y desparpajo, el embajador en Roma ante la FAO desembarcó en Bogota para anunciar que pronto tendrá despacho en Palacio. El incidente produjo indignación en el periodismo serio. Laura Arrieta, por ejemplo, colgó en X una “postal de indecencia y desfachatez”: Benedetti llegando a la Casa de Nariño con “pinta de gran señor, en camioneta con escoltas, a seguir viviendo de lo público porque algo sabe y tiene capacidad de chantaje”. La defensora del pueblo cuestionó el nombramiento por machista. El asunto causó molestia entre los más leales alfiles y aliados de Gustavo Petro, incluso quienes se preocupaban por las ilegalidades supuestamente cometidas en la “Casa de Nari” hace unos años. Sobre la destreza de Benedetti para manipular elecciones basta oír la grabación de su rabieta con Laura Sarabia en 2023. 



Verdad Abierta anotaba en 2020 que el poder de Hernán Giraldo en el Magdalena se basaba en unas muy buenas relaciones con “un grupo de comerciantes del interior del país que dominaban el mercado de Santa Marta”  a quienes les garantizaba seguridad. Además, que desde los noventa “su poder era tal que controlaba la política en la Sierra y sus alrededores. Tenía dólares, armas y miles de votos de las veredas y corregimientos que dominaba”. En una versión libre de 2007, el mismo Giraldo reconocía que “inicialmente los políticos iban a la Sierra en busca de votos. Después yo me reunía con las juntas de acción comunal, discutíamos unos nombres y entre todos escogíamos un candidato por quien votar”. 


En agosto de 2023, según Vera Salazar, quien ha seguido sus andanzas desde que lo apodaban Tornillo, “un Hernán Giraldo, rejuvenecido y consciente del poder y control, ha mantenido la estructura criminal que opera en la Sierra Nevada de Santa Marta y llevó a cabo un mandato electoral que se traduce en la presión de grupos armados para que campesinos, víctimas y personas vulnerables voten por el candidato que él escoja”. Esto era antes de ser nombrado gestor de paz por Petro, una infamia que causó menos malestar en la izquierda radical que el reencauche de Benedetti. 


“Insensibles a las críticas internacionales, los autócratas modernos están utilizando tácticas agresivas para contrarrestar las protestas masivas y el descontento generalizado”. La lúgubre frase es de Anne Applebaum en su ensayo “Los malos están ganando” publicado en 2021. Pone como ejemplo la tranquilidad con la que Vladimir Putin organizó unas elecciones en las que prohibió que unos 9 millones de personas pudieran candidatizarse, ni que el conteo de votos resultara misteriosamente alterado. Sería llover sobre mojado repasar las manifestaciones públicas de rechazo a Petro. Así, según esta teoría, el demócrata habría mutado a autócrata y, camuflado, ya estaría refinando estrategias para manipular votantes. 


Applebaum habla del “modelo Maduro” de gobernanza, un término acuñado por un activista para caracterizar a los gobernantes “dispuestos a pagar el precio de convertirse en un país totalmente fracasado, de entrar en la categoría de estados fallidos”, aquellos que aceptan, incluso promueven, “el colapso económico, el aislamiento y la pobreza masiva si eso es lo que se necesita para permanecer en el poder”. Por un mesianismo impracticable agravado con torpeza para administrar y ejecutar, el Gobierno del Cambio se acerca a una absoluta despreocupación por los resultados. “Muchas buenas intenciones, muchas frustraciones y falta de una estrategia real para transformar al país” anota el Nobel James Robinson, colombianólogo consagrado. Agrega que su política es demasiado personalista, queriendo hacer todo ya sin prioridades definidas. El costo en falta de oportunidades y decrecimiento es inevitable. No sorprende el auge masivo de la emigración colombiana bajo este gobierno. 


En otro estudio más reciente, Autocracy Inc., la misma autora busca elementos comunes al medio centenar de dictaduras vigentes en el mundo. Destaca como herramienta esencial la cleptocracia, “el conjunto de mafias administrativas y empresariales que se dedican al robo de los fondos del Estado… todos los sistemas autocráticos usan como lubricante la corrupción y el soborno”.


Aunque Petro pregona ser honesto y no tolerar la corrupción, los hechos lo desmienten, sobre todo los relacionados con personas de su entorno más inmediato que llegaron literalmente a enriquecerse con negociados o a cooptar la nómina de organizaciones estatales claves. El “modelo Maduro” original de ganar elecciones por pucherazo se ha vuelto difícil de ejecutar, por la complejidad técnica y las veedurías internacionales. Consecuentemente, se ha valorizado el savoir faire de los dos nuevos aliados petristas: soborno o coerción directa para las elecciones.  

 

REFERENCIAS


Applebaun, Mary (2021). “The bad guys are winning” The Atlantic, December


Azúa Felix (2024) “No exageremos…”. The Objective, Nov 20


EH (2024) “Aterrizaje de Benedetti causa enorme malestar en el petrismo de pura sangre”. El Heraldo, Nov 26


Elorza, Antonio (2024). “Un régimen de corrupción”. El Subjetivo, sep 26


Garzón, Camilo Andrés (2024). “Roa se atornilla en Ecopetrol con una junta directiva plegada a Petro”. La Silla Vacía, Noviembre 19


González, Olga L (2024). " El drama detrás de las visas". La Silla Vacía, Nov 1


Rico Torres, Alfonso (2024). "Me encanta Colombia, pero es una tragedia. Así calificó al presidente Gustavo Petro" Entrevista a James Robinson, premio Nobel de economía. Semana, Nov 30


Rubio, Mauricio (2024) “Campeón de violaciones infantiles, Paz Total y mutismo izquierdista”. El Espectador, Nov 28

 

SW (2024). “Maduro pide al Supremo que «aclare todo lo que haya que aclarar» sobre las elecciones”. swissinfo,ch, Julio 31


VA (2010) “Los años de Hernán Giraldo en la Sierra Nevada de Santa Marta”: Verdad Abierta, Nov 19


Vera Salazar, Norma (2023). “El paraco, el abogado, las víctimas y los votos” La Silla Vacía, Agosto 5

sábado, 23 de noviembre de 2024

Campeón de violaciones infantiles, Paz Total y mutismo izquierdista

Publicado en El Espectador, noviembre 28 de 2024


Hay sapos de este gobierno que toca tragarse enteros pero cuya lógica se entiende. Algunos batracios más difíciles de engullir resultan indescifrables: Hernán Giraldo como gestor de paz se destaca entre esos. 



El prontuario de este señor de la guerra es escalofriante. Sus víctimas en la Sierra Nevada y alrededores se calculan en 67 mil. Su especialidad era el abuso sexual de menores. El apodo de Taladro ilustra sus preferencias. “No violaba al azar… escogía sistemáticamente a las mujeres que quería acceder carnalmente y las seducía. Tenían características comunes: menores de 14 años de edad, vírgenes y anchas de caderas, buscando que fueran fértiles” anota Vera Salazar, secretaria de interior del Magdalena, magister en DDHH y estudiosa de las andanzas del macabro personaje. “Siempre estaba armado, ponía su arma en la mesita de noche, nunca había un preámbulo. Luego se quedaba dormido. Así una y otra vez”, anotó ante Justicia y Paz una víctima.


Escogida la presa, la llevaba a su finca en las estribaciones de la Sierra Nevada para tener vida marital por unos meses. Aunque al conocerlas buscaba cautivarlas con regalos, hasta casa o tierras para la familia, pronto se aburría y se encaprichaba con otra más joven. Entonces, “las regresaba a sus casas o las mudaba a otra localizada en alguna zona estratégica”. Así, su incidencia sobrepasaba el ámbito sexual. Las víctimas y sus hijos se volvían parte de la organización en los corredores por dónde entraba droga y salían armas. “Allí servían para alertar cualquier movimiento y tener control geoestratégico de la región” anota Vera. Muchas de estas niñas las entregaron voluntariamente sus familias a cambio de protección física y económica con el correspondiente estatus por ser parientes de Giraldo. “Todos sabían que si era mujer del Patrón tocaba respetarla”. 


Ante Justicia y Paz, Giraldo reconoció 38 hijos pero hay evidencia sobre unos 70. Muchos de ellos ingresaron al grupo paramilitar que se desmovilizó en 2006 con 1.700 efectivos. En 2008 fue extraditado a los EEUU donde la justicia lo condenó a 16 años de cárcel por narcotráfico. Al cumplir la pena volvió. 


Según la Fiscalía, a las cárceles colombianas en las que estuvo antes de su extradición le llevaban menores de edad. Una mujer de confianza arreglaba el traslado de víctimas de cuando comandaba las AUC. Una de ellas anotó que “me tocaba obligada permanecer en el cuarto con él hasta que se acabara la visita. Ingresábamos como a las 9 de la mañana y salíamos a las 4 de la tarde. Yo tenía que dejarme, no gritar, nada, ahí estaban todos los jefes de las autodefensas”. La celestina agregó que era responsable “de cuidar dos hermanas de 10 y 12 años. A una de ellas, la mujer del Patrón, la llevaba los domingos a La Modelo de Barranquilla para que sostuviera relaciones sexuales con él”. A mediados de 2023 la justicia transicional lo expulsó quitándole los beneficios de la Ley de Justicia y Paz por reincidir en sus crímenes desde prisión. 


El juicio por narcotráfico contra Giraldo culminó con un fallo histórico. El juez federal reconoció como víctima a Julio Henríquez Santamaría, conocido líder político de Santa Marta, asesinado por el entonces comandante del Frente Resistencia Tayrona. No era un activista cualquiera. Se trataba, según una comisión de Justicia y Paz, de un “defensor de Derechos Humanos, del ambiente, biólogo protector de la naturaleza, Consejero de Paz en el departamento del Magdalena, profesor, economista solidario”. Además, fue militante del M-19. A Hernández lo secuestraron el 4 de febrero de 2001 y luego lo asesinaron varios hombres armados “bajo el mando de Hernán Giraldo, a quien el Juzgado Único Especializado de Santa Marta… condenó a 38 años y cinco meses de prisión”. Según la hija de Henríquez, una década después de su asesinato, esa zona seguía siendo "de producción, procesamiento, exportación de coca e importación de armas, a manos de sus herederos en asocio o sometimiento a otros carteles”. El monstruo logró multiplicarse. 


“Cuando un gobierno llama Paz Total a la total impunidad, cuando llama gestores de paz a narcotraficantes y criminales (ellos) avanzan, prosperan, se adueñan del territorio y las instituciones, se convierten en amenaza para la democracia”, anotó Cayetana Álvarez de Toledo, diputada del PP español, en la asamblea de Camacol. Desde la siempre alerta y crítica militancia izquierdista no se ha oído nada que se acerque a la sensatez de esta reflexión. Por el contrario, con su habitual docilidad, el rebaño ha endosado la magnanimidad delirante de su líder Gustavo Petro: “ser gestor de paz es una condición del ser humano, no un regalo;  quien acepta esta condición, está dispuesto a resarcir las víctimas y a las garantías de no repetición”.


REFERENCIAS


Cifuentes Quintero, Santiago (2024). “Este es el prontuario sexual de Hernán Giraldo: uno de los 18 exparamilitares designados gestores de paz por Gustavo Petro”. Infobae, Nov 13


CIJP (2011). “Julio Henriquez Santamaria”. Comisión Intereclesial de Justicia y Paz, Feb 4


Gómez Maseri, Sergio (2016). “Víctima de 'para' celebra decisión de juez de EE. UU.” El Tiempo, Marzo 14


Jaramillo Bernat, Emma (2023). “La justicia transicional expulsa al hombre considerado como el mayor violador del conflicto armado colombiano”. El País, Agosto 23


Rojas, Juan Carlos (2019). “Investigación revela que 'expara' abusó de unas 200 menores de 14 años”. El Tiempo, Abril 6







sábado, 16 de noviembre de 2024

La indignante imputación a seis ex comandantes de las FARC por la JEP

 Publicado en El Espectador, noviembre 21 de 2024


Fuera de confirmar que no pisarán una cárcel, entre las injusticias de la imputación a la cúpula fariana por reclutamiento y abuso sexual de menores está el mutismo alrededor de algunas mujeres. 


Las cercanas a los victimarios, como Sandra Ramírez y, sobre todo, Victoria Sandino, tenían posición privilegiada y bastante poder en la guerrilla. Al igual que los imputados, pudieron actuar contra los crímenes y no lo hicieron. Después, reinsertadas, con curul en el Congreso, han tratado de callarlos. En el otro extremo, víctimas asociadas a la Corporación Rosa Blanca, alegan no haber sido oídas por la JEP y seguir amenazadas.




El CNMH recopiló 19 testimonios de este colectivo. Catalina fue reclutada después de una “capacitación” para menores sobre el socialismo. Pensó que volvería a su casa pero Alexis la llamó, se encaprichó y le anunció que se llamaría Leidy. Tenía 45 años, ella 10 y nunca más volvió “a mirar a mi mamá”. La violó diciéndole que ya era mujercita. “Me pegaba, me mordía, me amarraba en las noches, me ponía a cargar leña y cuando me veía hablando con alguien también me castigaba”. A los 13 años quedó embarazada y la obligaron a abortar. Él prefería no dejarla planificar porque había muchos jóvenes por ahí. Tras cinco embarazos, el último lo escondió. El hijo nació donde unos campesinos y cuando fueron a quitárselo “pedí ayuda en el batallón y me desmovilicé”.


Otra Rosa Blanca, Lorena Murcia, fue noticia por su enfrentamiento judicial con Sandra Ramírez, compañera de Tirofijo en la guerrilla y luego senadora. La denunció penalmente para que dejara de hablar sobre crímenes en la guerrilla. Reclutada a los 17 años, Ramírez tuvo claro ascendiente sobre el máximo líder guerrillero al que ayudó a superar actitudes machistas. “Fue una tarea dura que nos dimos. No solamente fui yo. Lo hicimos un colectivo de mujeres que anduvimos muy cerca de él”. Marulanda empezó a verla no solo como compañera “sino como mujer que podía contradecirlo, que tenía mis propias opiniones, que peleaba no solo por mi espacio sino por el de las mujeres dentro de la guerrilla… los resultados se fueron dando y viendo”. No la conmovieron las infames afrentas que sufrían las subordinadas de su consorte. 


La influencia de Victoria Sandino sobre la cúpula fariana es más nítida. Aplazó su ingreso para estudiar en universidad privada. Entró a la guerrilla a los 26 años después de militar en la JUCO y la UP. Cuando llegó a la unidad Teófilo, El Paisa, uno de los imputados, dijo: “a esta mujer no la puedo dejar aquí. Es periodista”. La mandaron con Raúl Reyes, del secretariado, a trabajar en comunicaciones y “en el tema de la formación de muchas mujeres”. Con Olga Marín, fotógrafa y compañera del canciller, instruyeron “a muchas mujeres… motivarlas más, había que pelear, había que salir adelante”. Hace énfasis en su vocación política: “fui sindicalista, dirigente juvenil, lideresa con las mujeres, me organicé con ellas”. En el Páramo del Sumapaz, “iba a reuniones con Marulanda, con Alfonso Cano”. Organizaba talleres y charlas: “hablábamos temas sobre el papel de las mujeres en la insurgencia… era lo más revolucionario que estábamos haciendo, hablar de ser iguales”. No cabe ninguna duda que tuvo gran poder en la guerrilla. Según una de las víctimas  ante la JEP “si uno mira el Estado Mayor Central, no fueron muchas las mujeres que lograron escalafonar hasta allá, está VICTORIA SANDINO”. 


La lideresa se considera afortunada: siempre estuvo en unidades del secretariado donde la discusión contra el machismo era profunda. “Entonces por norma, por norma, no se permitía que nadie lavara la vajilla de nadie, fuera pareja o no fuera pareja. Por norma no se permitía que nadie le lavara la ropa a nadie, sino que cada quien lavaba lo suyo”. Trasladó a la guerrilla una parte del discurso aprendido en la universidad y la militancia urbana. Ignoró las conductas graves como reclutamiento forzado, violaciones, tortura y esclavitud sexual. Pero al reinsertarse fue bien acogida por el establecimiento feminista.



Ante la JEP, tras argumentar que para las niñas y jóvenes campesinas la vida guerrillera era tan dura como con sus familias, Sandino y sus compañeras señalaron, con enorme cinismo, “vivencias intrafilas distintas a las relatadas por las víctimas acreditadas”; cercanas a la comandancia, ellas sí “tuvieron la posibilidad de decidir cuestiones sobre su vida sexual y reproductiva”.


En varios testimonios del CNMH, aparecen encuentros con Victoria Sandino que confirman su posición y papel ante las víctimas. Juanita llevaba 20 días amarrada por oponerse a un aborto cuando la comandante le advirtió que no jugara con la revolución, “que yo no era nadie para tener un hijo”. 

 


REFERENCIAS


Álvarez, Angie Vanessa (2020). “‘Roja, Violeta y Guerrillera’. La creación del feminismo insurgente en la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común, FARC, desde la experiencia de vida de Victoria Sandino”. Tesis de Magister en Estudios Políticos, Universidad Nacional, IEPRI 


JEP (2024). "La JEP imputa a seis exintegrantes del Secretariado de las Farc-EP por crímenes de guerra de reclutamiento y utilización de niñas y niños y otros crímenes asociados". Comunicado 165  Auto Nº 05 de 2024


Los Informantes (2023). “Lorena Murcia y su dramática infancia”. Diciembre 3


Mendoza, Plinio (2029). “La presidenta de la Corporación Rosa Blanca, que agrupa a víctimas, cuenta su terrible experiencia”. El Tiempo, mayo 6


Reynoso, Lucas (2024). "La JEP imputa a seis excomandantes de las FARC por el reclutamiento forzado de al menos 18.677 niños". El País, Nov 13


Rodríguez Álvarez, Santiago (2024). "No tuve niñez: las claves de la imputación por reclutamiento a las Farc". La Silla Vacía, Nov 16


Romero Garzín, Fabian (2019). "Con las denuncias de las violaciones nos quieren estigmatizar: Timochenko". wradio.com, marzo 15


Rubio, Mauricio (2019). "Una militante desmemoriada". El Espectador, Febrero 14


Salazar, Sania (2017) “La lucha inconclusa de las mujeres de las Farc”. Consejo de Redacción, Nov 10


Semana (2022). “El lío jurídico de Lorena Murcia y Sandra Ramírez”. YouTube


Villa-Guerrero, Katherine (2022). Ser mujer en la guerra: cuerpos, subjetividades y tránsitos. Corporación Universitaria Minuto de Dios - Uniminuto

miércoles, 6 de noviembre de 2024

La invisibilidad de la incompetencia, una nueva epidemia global

 Publicado en El Espectador, noviembre 14 de 2024

Ignorar la propia ignorancia es un mal que crecientemente aqueja al mundo y alcanza nuevos límites con el petrismo, el sanchismo, el  chavismo, el mielismo, el trumpismo etc… A veces de manera pendular. 



En Febrero pasado, al concederle la Cruz de Boyacá al Liceo Francés, Gustavo Petro afirmó que la especie humana debería “expandir el virus de la vida por las estrellas del universo…Los latinoamericanos (son) capaces de irradiar la humanidad… (cuya) misión es el universo… Nos lo impide estarnos matando entre nosotros… Somos etnia cósmica”. 


Más aterrizado, en la Asamblea de la ONU el mismo Petro  afirmó  que “el proyecto democrático de la humanidad está muriendo con la vida, mientras los racistas, los supremacistas, los que creen que los arios son la raza superior, se aprestan a dominar el mundo escribiendo el terror de las bombas sobre los pueblos…. Están matando el pueblo elegido de Dios… Hay una razón para este Armagedón… La lógica de la desigualdad social… la mayor de nuestra historia como especie”. 


Yolanda Díaz, vicepresidenta del Gobierno español, intentó resumir la, según ella, oportuna y acertada gestión de la DANA por el ejecutivo de Pedro Sánchez. A pesar de estar leyendo su intervención, anotó que "son días muy difíciles. Desde el primer minuto de la pandemia estamos trabajando para avanzar al servicio del pueblo valenciano”.  


La polémica ley del “solo sí es sí” condujo a 121 excarcelaciones y 1200 rebajas de penas para condenados por delitos sexuales. Recién aprobada, Irene Montero, entonces Ministra de Igualdad con formación en psicología, afirmó que "hay jueces que no están cumpliendo con la ley por machismo”. Propuso contrarrestar esa tara con “formación obligatoria” en la rama judicial. “Vamos a mejorar cada vez más la capacidad de las instituciones”. 


Ejemplos de incompetencia insolente, delirante, se encuentran también a la derecha, en muchos países. El efecto Dunning-Kruger (D-K), propuesto por el psicólogo social David Dunning caracteriza a “las personas con mal desempeño en ámbitos sociales e intelectuales que parecen no ser conscientes de lo deficiente que es su experiencia. Esos déficits les dejan una doble carga: no sólo su conocimiento incompleto y erróneo los lleva a cometer errores, sino que esos mismos déficits les impiden reconocer cuándo actúan equivocadamente”. 


En distintos campos se sabe que los humanos, más terrenales que cósmicos, tenemos dificultades para auto evaluarnos. Sobre estimamos habilidades y minimizamos limitaciones. Cerca del 90% de los conductores en EEUU creen ser más duchos que el promedio. Además, quienes muestran menor destreza en un campo son más propensos a sobrevalorar sus capacidades. La disciplina económica plantea que la ignorancia puede  ser racional: ganar habilidad no siempre trae beneficios tangibles, entonces no siempre vale la pena buscarla. Dunning discrepa de esta visión. En su lugar, propone que la ignorancia es prevalente en la vida cotidiana pero invisible para quienes la sufren.  


Se han encontrado personas que manifiestan haber vivido situaciones y eventos o tener conocimiento sobre documentos e incluso leyes inexistentes, ficticias. “El problema del mentiroso es que acaba creyendo sus propias historias, hasta el punto de que ya no puede distinguir entre la verdad y la ficción. Por eso, resulta tan convincente”.


Muchos experimentos se han hecho en el ámbito médico, comparando las apreciaciones de desempeño de quienes se educan con las de quienes los forman y evalúan. En ese campo, basado en la ciencia, el desfase puede superarse. En asuntos sociales, la situación se complica por las dificultades de medición y por la ignorancia camuflada: el líder no tan ignorante que manipula la verdad para poner a prueba la lealtad de quienes creen ciegamente lo que diga. Recurre a mitos, leyendas, prejuicios y charlatanería sumándole una actitud pendenciera y agresiva contra quienes no comparten su narrativa y considera enemigos. Tal escenario es común cuando la ideología y el cálculo político reemplazan el conocimiento riguroso, basado en la evidencia, la técnica o la ciencia. Así está ocurriendo en España en partidos políticos de varios colores. Ahora se destaca el PSOE -que alguna vez fue humanista, dialogante, racional y menos corrupto- con un total desapego a la verdad, que su líder volvió absolutamente maleable.  


Los activismos y fanatismos han sido entornos fértiles para la propagación de esta epidemia surrealista. Ni hablar del legado de la insurgencia romántica y armada. Basta el vínculo emocional con un líder, a veces antiguo comandante, que machaque consignas simples pero contundentes sobre un largo inventario de asuntos. Quienes lo siguen en rebaño dictarán cátedra sobre la lista completa. La conciencia WOKE es un buen ejemplo. La paradoja es que, para combatirla, los norteamericanos acaban de elegir un político que escupe mentiras y disparates sin titubear. Nace una MAGA que en un cuatrienio hará resurgir de nuevo el wokismo. Y así sucesivamente. 


REFERENCIAS


Discurso Gustavo Petro ante la 79ª Asamblea General de la ONU


EC (2024). “Somos etnia cósmica: Petro sacó otra vez su lado filósofo y agitó las redes, ¿qué quiso decir?”. El Colombiano, Febrero 14


De Segovia, José (2015). "El Impostor: Todos somos un poco actores". entrelineas.org, Agosto 29


Dunning, David. (2011). The Dunning–Kruger effect: On being ignorant of one's own ignorance. In Advances in experimental social psychology (Vol. 44, pp. 247-296). Academic Press.


Durán, Gonzaga (2024). "Yolanda Díaz se vuelve a liar: llama «pandemia» a la DANA pese a estar leyendo su intervención". okdiario.com, Nov 7


Moncada, Alberto (2023). “Mito o realidad: reservas de hidrocarburos”, Razón Pública, Junio 4


OC (2022). "Irene Montero sobre la ley del 'sólo sí es sí': "El machismo puede hacer que haya jueces que interpreten erróneamente la ley". ondacero.es, Nov 16


Rincón, Reyes (2023). "Más de 1.200 rebajas de penas y 121 excarcelaciones por la ‘ley del solo sí es sí'". El País, Sep 18